El componente cualitativo del estudio “Flujos de curatoría informativa en adolescentes”, llevado a cabo por la Escuela de Comunicaciones y Periodismo de la UAI y financiado por ANID (PLU190014) (ver ficha metodológica en el documento adjunto a la entrada), señala una personalización del consumo de contenidos informativos, definida por los intereses previos de los jóvenes, antes que por la selección y jerarquización realizada por los medios de comunicación profesionales. Esto no quiere decir que el contenido noticioso de los medios tradicionales no aparezca en sus feeds. Lo hace y es relevante, como veremos en entradas futuras. La diferencia está en que esas noticias conviven en un entorno más saturado de información, pero también en plataformas que las organizan y distribuyen en función de los intereses de usuarios y seguidores. De este modo, los adolescentes participantes del estudio deciden selectivamente qué es noticia a partir de una percepción de contenidos basada en sus intereses particulares, pero también como resultado de la organización y circulación de los contenidos que hacen los medios sociales online a través de sus algoritmos. Algunas citas del componente cualitativo del estudio permiten comprender de primera fuente cómo los adolescentes seleccionan noticias en base a sus intereses, y en un entorno digital donde la función informativa convive con otras, tales como la entretención:
Lo clásico es seguir el nombre del deporte y te sale todo lo relacionado con eso. También sigo los hashtags de videojuegos y tecnología. En música soy más quisquilloso, ahí sigo la página “Loudwire” que da actualizaciones del mundo del rock y metal, creo que esa es la cuenta que más veo en torno a la música” (Hombre, RM, colegio particular subvencionado).
Yo no utilizo mucho Instagram, pero lo veo para entretenerme. Y si me informo con eso es por un efecto secundario” (Hombre, RM, colegio municipal).
Lo estuve pensando y no hay un usuario al que siga, sí hay un tipo de contenido que busco. Es algo que me interesa, pero no sé cómo hacerlo, por ejemplo, los cómics. Es algo que mi mente va imaginando y después voy buscando” (Mujer, RM, colegio municipal).
Dicho eso, la pregunta que cabe formularse es ¿cuáles son los temas que les interesan a los adolescentes en Chile? Para responderla, utilizaremos la encuesta realizada en el marco de este estudio a 2.684 adolescentes –con edades entre 14 y 17 años, provenientes de establecimientos educacionales seleccionados al azar de la regiones Metropolitana y Valparaíso– durante el primer semestre de 2021.
A nivel general, como indica el gráfico más abajo, los temas que suscitan más interés entre los adolescentes son la desigualdad social (69% declara mucho interés) y el abuso contra las mujeres (60%); mientras que la política es el que despierta menos interés.
Este gráfico también permite comparar el nivel de interés personal con la importancia percibida por los adolescentes encuestados de cada tema de parte de los medios tradicionales y las redes sociales. Ello permite observar que los adolescentes no ven sus intereses reflejados con el mismo grado de importancia en la cobertura mediática y de redes sociales. La desigualdad social, que interesa a un 69% de los encuestados, no es percibida como importante para los adolescentes por parte de los medios tradicionales: solo 22% considera que le dan mucha importancia, registrando una brecha de 38 puntos porcentuales, la más grande entre aquellas donde los jóvenes informan más interés que la importancia asignada por los medios. Algo similar ocurre con el abuso contra la mujer, aunque en este tema los estudiantes observan que se les otorga mayor tratamiento en las redes sociales.
En cambio, el tema de los movimientos sociales es donde existe mayor diferencia entre la importancia que le otorgan las redes y sus propios intereses: 66% considera que las redes sociales le dan mucha importancia, mientras que 41% se declara interesado. Finalmente, la política, justamente la materia que concita menos interés para los adolescentes es el que perciben como más importante para los medios tradicionales, con una brecha de 50 puntos porcentuales entre su interés personal y la importancia en medios tradicionales y una brecha menor, pero aun así sustancial, de 22 puntos porcentuales respecto a las redes sociales.
En suma, el promedio del valor absoluto de las brechas es de 12 puntos porcentuales en el caso de las redes sociales, mientras que para los medios tradicionales la brecha promedio es de 25 puntos porcentuales. Solo en tres temas (tecnología, delincuencia, y crisis económica) hay una brecha entre un interés personal alto y una menor importancia percibida de los temas en redes. Pese a eso, en general, los jóvenes encuestados perciben que las redes sociales están mejor alineadas con sus intereses que los medios tradicionales, en cuanto a la importancia relativa que les asignan a diversos temas de actualidad.
