La evidencia internacional en diversos contextos muestra que el apoyo percibido puede promover el bienestar y ayudar a enfrentar mejor los problemas de salud. ¿Será ese el caso chileno en tiempos de pandemia?
El apoyo social es un término amplio que abarca una serie de características específicas del mundo social de los individuos. Dos de ellas, que han sido ampliamente estudiadas en la literatura, son el apoyo efectivo y el percibido1. El apoyo efectivo se refiere a las ayudas efectivas recibidas por los individuos provenientes de sus redes personales y, en menor medida, de instituciones. En tanto, el apoyo percibido se refiere a las percepciones del receptor con respecto a la disponibilidad general de apoyo o la satisfacción global con el apoyo brindado2. Se podría pensar que ambos están correlacionados, sin embargo, numerosos estudios han obtenido correlaciones relativamente bajas entre ambos apoyos3. Independiente de eso, hay evidencia de que los apoyos pueden promover el bienestar4 y ayudar a enfrentar mejor los problemas de salud5. ¿Será ese el caso chileno en tiempos de pandemia?
Un análisis de regresión lineal, controlando la influencia de factores sociodemográficos, muestra que el apoyo percibido está asociado positiva y significativamente con la satisfacción con la vida declarada por las personas: mientras más apoyo perciben los individuos que podrían recibir cuando tienen problemas económicos, personales o de salud, mayor es la satisfacción por la vida reportada. Algo similar ocurre con los problemas de salud mental: quienes más apoyo perciben reportan una frecuencia menor de problemas de salud mental durante las últimas dos semanas, controlando por la influencia de otros factores.
El apoyo percibido puede atenuar la influencia negativa de los problemas económicos en los reportes de problemas de salud mental.
Podríamos decir entonces que percibir apoyo ayuda a los chilenos a lidiar con los problemas económicos. Esto atenúa la ocurrencia de problemas de salud mental, lo que deriva indirectamente en niveles de bienestar más altos durante la pandemia.
Ahora bien, se podría pensar que la influencia del apoyo efectivo se da a través del apoyo percibido, esto significa que, haber recibido ayuda de parte de instituciones y personas puede generar la percepción de sentirse protegido ante la adversidad. Sin embargo, ya fue mencionado que la literatura internacional muestra correlaciones bajas o inexistentes entre ambas fuentes de apoyo. El caso chileno no es la excepción.
De todas las fuentes de apoyo efectivo incluidas en la encuesta, la única que parece estar asociada estadísticamente a una mayor percepción de apoyo es haber recibido apoyo de familiares y amigos cercanos.
Esto no es sorprendente a la luz de estudios previos que señalan que los miembros de la sociedad chilena tienden, en general, a depender más de vínculos adscritos de sociabilidad, como los lazos familiares, que de aquellos voluntarios y asociativos6.
Por último, varios estudios a nivel internacional muestran que, a diferencia del apoyo efectivo, el apoyo percibido ha estado consistentemente relacionado con mejores indicadores de salud7. La evidencia acerca de las conductas y percepciones de los chilenos durante la pandemia del COVID-19 apoyan también esa lectura.